lunes, 16 de febrero de 2015

Break

Ya casi no puedo hacer el esfuerzo de no dejar caer los párpados, necesito un break con café incluído. Conecto los auriculares a mi máquina de sonido, apreto play en el cassettero (sí, sí, en éstos tiempos hiper tecnológicos yo sigo utilizando cinta para grabar algunas cosas). Escucho con la cabeza apoyada en el cuaderno. Se me pone la piel de gallina por la letra, la repito despacito, casi sin sonido. Abro los ojos cuando el golpe seco del botón que se levanta me pone alerta. Veo el azul de las letras desteñidas en el papel. No me muevo. Ahora escucho el canto de otros pájaros. Está amaneciendo...voy a tener que volver a pasar esta hoja en limpio antes de salir.