"El está tan lindo, no puede durar" canto en voz alta modificando la letra de la canción, al ver que llegó antes que yo. Sonríe y se sonroja a la vez sin despegar el celular de la oreja. Seguro se trata de trabajo.
Camina de un lado a otro nervioso, tratando de solucionar algún problema ; lo saludo con un ademán para no interrumpirlo. La llamada se extiende y cuando empiezo a poner caras de impaciencia tapa el micrófono para que del otro lado no escuchen que está riendo. Se lleva el índice a la boca dividiendo la sonrisa, indicando silencio. Tengo que seguir esperando . El gesto vuelve a ponerse serio.
Cuando al fin se despide de su interlocutor, cruza la calle para ahora sí saludarme. Es uno de los primeros días de calor y el sol me arde un poco en la piel pero el aire aún no entibia. Mientras lo abrazo,el diablo vuelve a pasar su lengua helada por mi espalda en forma de presentimiento, como hace años no hacía. - "No puede durar"- susurra...
- Eu ¿qué pasa? - me dice cuando nota mi estremecimiento. "Nada" - le digo, sin despegar la nariz de ése huequito entre el cuello y el hombro al que llego en puntas de pie - "Tengo un poco de frío nada más".
domingo, 14 de noviembre de 2021
...
domingo, 24 de octubre de 2021
Kandinsky
"Hay que ser valiente para pelear con tu sombra"
WOS.
M camina hacia mí a paso lento pero seguro. Se detiene justo enfrente, hace días que no nos vemos y mucho que no nos juntamos a caminar y conversar, así que cuando se desinfla en un suspiro en el abrazo, me doy cuenta que también extraña esos ratos compartidos. Empezamos la bajada rumbo a la rambla. Pasan cuadras y cuadras en silencio. Se que tiene algo que decir y también se que le cuesta así que espero paciente. Cuando vislumbro el agua el corazón me da una patadita de alegría.
El sol está bajando y no quiero perdérmelo así que nos sentamos, le doy la espalda a la ciudad, él al río . Se saca la capucha y sube los lentes a la cabeza. Un grupo de personas corre y los ojos de M lo siguen con la nostalgia de alguien que se ve momentáneamente impedido de hacer lo que ama.
El sol se hunde y los rayos rojizos cual filtro de instagram causan un efecto extraño al rededor de su cabeza, una especie de corona de fuego. Es uno de los primeros días cálidos a pesar de que estamos en octubre y se ve obligado a sacarse la campera. En su brazo izquierdo se asoma el film que indica un nuevo tatuaje. La curiosidad me puede y levanto la manga para ver. Un montón de trazos geométricos y colores mezclados con sangre aún, estallan en el pálido de la piel: Kandinsky. Toco el relieve - ¿Te duele?
Niega con la cabeza y vuelve a bajar la manga. Más abajo, en el mismo brazo, un surco violáceo oscuro llega hasta la muñeca, un relieve que nunca se va, un recordatorio eterno del dolor, una pausa en la vida.
¿Y ahí? - pregunto señalando la cicatriz.
- Ahí si... todos los días -